Corto: Parte 3

Mis labios no besan ya y mi corazón, me pide que te encuentre donde estés

que te busque en cualquier lado porque sigo enamorado

y nunca te quise perder.

Recuerdo que las vacaciones de ese año fueron la mierda misma, en ese entonces era hija única y mis papas no habían tenido mejor idea que ir de vacaciones a Cancún. Ustedes dirán, “esta está loca por decir eso” pero saben, no. Lo único que yo quería era que en esas vacaciones lo único que yo quería era que llegara la fiesta que Euge había organizado para poder verlo, o tener algún encontronazo con él en algún lugar.

Estaba loca por él, y eso me llevaba a hacer locuras, y muchas, había decidido que en Cancún me haría un cambio de look, me corte el pelo, me hice el flequillo recto, y tome sol para volver con algo de color. Quería gustarle, si hasta el momento como era no lo había conseguido lo haría de otra forma. Cuando volvimos, mi último año empezó…

Marzo.

Euge: ¡¡a weeee!! ¡Pero mira el súper cambio que te hiciste!

Lali: viste… quería cambiar un poco. –deje mi mochila –

Euge: no me imagino porque…–ella se sentó –

Lali: mejor… per bueno, ¿qué tal tu verano?

Euge: ¡no sabes la fiesta que te perdiste boluda! ¡¡Mi fiesta y los dieciocho de Nico fueron la mejor fiesta del año!!

Lali: si algo me entere por facebook y vi fotos –dije remarcando la ultima palabra –

Euge: ¿la viste?

Lali: la vio medio colegio Euge

Euge: bueno yo qué culpa tengo… –en la red social habían subido una foto de ella y Nico chapando, no, tragándose entre los dos –No me arrepiento de esa noche igual

Lali: ¿no?

Euge: no, porque después nos seguimos viendo…

Lali: ¡JODEME! –dije algo fuerte y algunos de los que ya estaban ahí me miraron–

Euge: si y fue el mejor verano de todos…

Lali: ¡que envidia! El mío fue una caca total…

Euge: ¿por qué no lo viste? –Asentí – ¿y ya llego? –negué–

Lali: me muero por verlo…

Euge: ya va a llegar… aun es algo temprano –Pero él no llego…y Belén tampoco…

Abril…

Mayo…

No, tampoco apareció, cuando llegaba rogaba al cielo porque ese día el apareciera por la puerta, siempre había una esperanza en mí, algo que me decía que no pierda las esperanzas, que el llegaría en cualquier momento, pero nunca llego, ni en marzo, ni en abril y ya íbamos tres semanas de mayo cuando volví a respirar…

Estaba terminando de sacar mi carpeta, porque el profesor ya había llegado al aula, cuando Euge entro agitada porque subió corriendo la escalera supongo.

Lali: tarde rubia…

Euge: lo sé morocha, pero eso no importa ¡no sabes!

Lali: ¿que no se? –la mire y ella tenía una sonrisa de estúpida en la cara – ¿por qué sonreís como estúpida?

Euge: pff! Está claro que de las dos la estúpida no soy yo… no sabes a quien vi…

Lali: no, ¿a quién? –ella me siguió mirando… me miro… me miro… me miro… y…– ¡hay no…!

Euge: hay si…

Lali: hay no…

Euge: hay si…

Lali: hay no…

Euge: la rubia soy yo… ¡si tarada! Está en la oficina del preceptor, acabo de venir de ahí para que me ponga presente y el estaba hablando con Peter y supongo que con su mamá…–tocaron la puerta del aula y por el vidrio se vio a preceptor, el profesor le dijo que entre –

Preceptor: Profesor aquí le traigo un alumno que llego tarde… –cuando lo vi creo que mi corazón se salteo, cuatro, no cinco latidos. Sentí que todo el aire se iba de mi cuerpo y como mis ojos se llenaban de lágrima –

Lali: ¡volvió Euge! ¡Volvió! –dije en un susurro –

Euge: respira Lali, te vas a poner morada… –mire mi carpeta cuando él me miro, todo el grupo de compañeros se paró a saludarlo, era alguien muy querido –

Lali: no puedo creerlo…

Euge: ¿estás llorando? –la mire –

Lali: si boluda, cállate–me seque mis lagrimas y parpadee varias veces para que mis ojos volvieran a la normalidad. Todos volvieron a sus lugares, y él se sentó en el mismo lugar que el año pasado, la clase siguió su curso y yo feliz como nunca en este año. –

Algunos días habían pasado desde que el volvió, al menos ya sabía que lo vería en lo que quedaba de ese año y era muy feliz.

Pero uno de esos días casi me muero de un ataque al corazón…

Peter: hola…

Lali: hola… –le sonreí bobamente –

Peter: te quería pedir un favor…

Lali: decime… –¡¡¡ÉL ME QUERIA PEDIR UNA FAVOR A MIIII!!! ¡¡¡A MIIIII!!!! –

Peter: es que ninguno de los chicos tiene las carpetas completas y quería saber si vos podías prestármelas…

Lali: si, no hay problema…

Peter: voy a traer mis cosas… – ¡STOP! ¿Se iba a sentar aquí? Hay, hay Lali respira… ¡La carpeta! Empecé a pasar las hojas, mierda, mierda, tenía varias hojas escritas con un “Peter Lanzani te amo” ¡y él iba a ver mi carpeta! Arranque las hojas y las metí dentro de mi mochila –

Euge: ¿qué te pasa?

Lali: Peter quiere que le preste mi carpeta…

Euge: y vos tenes hojas escritas jajajaja

Lali: cállate que ya viene…–ella miro para atrás y Peter ya venía con su carpeta–

Euge: hola Peter…

Peter: hola China…

Lali: no trajiste silla–le dije a Peter–

Peter: no importa, me siento con vos…

Lali: ¿conmigo? Emm, bueno… –me hice a un costadito de la silla y él se sentó y empezó a mirar mi carpeta. ¡Estaba colorada! ¡Tomate! ¡Rojo pasión! ¡Carmesí! Cuando la profesora entro, nos vio y no nos dijo nada. –

Peter: ¿desde donde copio? –no estaba cerca, estaba a milímetros de mi cara, milímetros–

Lali: emmm… desde aquí…–lo mire y todo el aire se fue de mi cuerpo–

Peter: me gusta cómo te queda el flequillo…

Lali: gracias…–me toque mi flequillo y sonreír. ¡CENTRATE TONTA! Va a pensar que eres una boluda –

Peter: si…

Lali: ¿Por qué no venias? –la pregunta salió de mi boca antes de que mi cerebro la procesase–

Peter: me cambie de colegio con Belén…–él seguía copiando–

Lali: y que paso que volviste…

Peter: no me gustaba el colegio y menos los chicos…

Lali: ¿y Belén? –me arrepentí en el mismo momento en que lo dije–

Peter: se quedo en ese colegio.

Lali: claro…

Peter: además, este es el último año y el viaje de egresado lo quiero hacer con mis amigos y amigas…

Lali: ¿y yo soy tu amiga?

Peter: Si Lali, sos mi amiga…

Lali: vos también sos mi amigo… –puse todo mi empeño en no golpear mi frente con mi mano, o darme contra la pared. –vas a ir al viaje de egresados entonces…

Peter: si, vamos a bailar mucho en Cariló…

Lali: si, puede que si… –sonreí tontamente… ese viaje prometía. –

Esa fue la primera vez que me sentí esperanzada por lo que dio Peter, fue la mayor ilusión que tuve en mi vida con él. Ya mi cabeza pensaba posibles cosas para poder estar juntos. Todas y cada una de ellas pensando en un beso.

Ya habíamos empezado a hablarnos más, siempre nos buscábamos para hacer los exámenes o ayudarnos en los trabajos en grupos, sin Belén nuestra relación había mejorado considerablemente y eso me hacía mucha ilusión.

Antes de lo que yo pensaba, antes ese viaje de egresados paso algo que ni yo me lo esperaba.

Continuara…

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Holaaa! me alegro que les este gustando el corto, GRACIAS A LAS QUE LEEN Y COMENTAN! es muy lindo leer comentarios porque son los que te dan ganas de escribir. espero les siga gustando.

Emi: si puedo, no te prometo nada, pero si me viene algo de inspiración lo escribo...

GRACIAS POR LEER...