domingo, 11 de enero de 2015

Corto: Te sigo Deseando.




Te sigo deseando.
Me tire en la cama, y lleve mis brazos a mi rostro, no definitivamente este no era mi día, va seamos sinceros, no era mi día, mi semana, mi mes, ni siquiera este nuevo año sería mi año. Me daba bronca por eso.
Las cosas cada vez estaban peores en esta casa, con Martina taladrándome la cabeza todos los putos días, con la misma mierda siempre. No podía seguir así esto, no era vida para nadie. Me quería matar. Oí sus pasos antes de escuchar su voz, la cual me tenía los huevos llenos.
Martina: porque te vas Juan, NO TERMINAMOS DE HABLAR!
Juan: yo ya dije todo lo que tenía que decir…
Martina: ¿Qué les digo cuando me pregunten por vos?
Juan: que me sentía mal, yo que se…
Martina: no puedo hacer eso!
Juan: si podes Martina, hoy no estoy para bancarme a tu familia…
Martina: no entiendo que te hicieron
Juan: mejor dejemos el tema ahí queres!
Martina: cuando te pones así no hay quien te banque…
Juan: hablo la persona que todo el mundo ama…
Martina: sos un tarado! –dijo y se dio la vuelta para irse –
Juan: lo mismo digo de vos mi amor. –dije con ironía –
Me sentía con una bronca por dentro. Odiaba a esa familia, al principio me caían bien, luego la re cagaron llenando a Martina de cosas en contra de mí. En especial la madre, y por perro faldero el padre, y del hermano mejor ni hablemos. Pero todo empezó cuando no quise hacer lo que ellos querían, solo por eso…
Tenía ganas de salir y desahogarme, que mas daría por repetir lo que paso la noche del 24 de diciembre del año pasado, pero no podía salir hoy, mañana tenía trabajo y Martina volvería antes de que yo regresara eso era seguro.
Me acomode en la cama y encendí el plasma. Pase los canales y no estaban dando nada interesante, seguí cambiando hasta llegar a los canales altos, esos donde había películas para adultos la gran parte del día, justo encontré una que estaba empezando.
La chica comenzó a quitarse lentamente la lencería, y honestamente yo no lo disfrutaba. Pero no le quité los ojos de encima. La adrenalina fluyó en mi sangre violentamente de golpe. La chica ya estaba desnuda para cuando un hombre alto, musculoso y con el miembro erecto salió de la ducha y se sorprendió (bueno, en realidad no, era un pésimo actor) pero la chica jadeó sonriente, asombrada por la situación incómoda en la que se encontraba. La chica se inclinó a besarlo y lentamente bajó hasta sus caderas para tomar su miembro. Ella comenzó a acariciarlo lentamente, a besarle por todas partes, y me sorprendió al ver cómo tomaba el miembro en sus manos: lo retorcía de derecha a izquierda y eso aparentemente le gustaba. Y llegó la escena donde follaban. La chica estaba tumbada en el lavabo mientras la cámara filmaba exclusivamente cómo su miembro entraba y salía de su cuerpo.  La tensión sexual rodeó toda la habitación cuando sus gemidos y jadeos se hicieron altos y el sonido de sus cuerpos chocando mostraba qué tan profundo y fuerte la estaba follando.
Tome mi miembro entre mis manos y me acorde de su cuerpo, ese que me volvió loco la noche que la tome,  me la imagine con su pelo rubio corto esparcido en las almohadas, abierta de piernas para mí… sin dudas fue la mejor follada de mi vida y no solo por el sexo…
Flashback
Salí de casa de los padres de Martina, no podía crees lo mierdas que eran. Ya les había aguantado muchas pero que vengan a pedirme plata para sus vicios era mucho, y encima que ella se ponga de su lado fue la gota que colmo el vaso.
Agarre el auto y partí sin rumbo, no sabía dónde ir, no tenía ni idea de lo que quería hacer, o tal vez si, sacarme la mierda que llevaba encima por culpa de esa familia tal vez. La noche de buenos aires no estaba tan transitada ya que era noche buena y la gran mayoría estaba en sus casas festejando con sus familias.
Me pase algunos semáforos en rojo, pensé en donde podía ir, y sin darme cuenta fui a parar a ese lugar de Buenos Aires que recordaba de mis viejas épocas en las que salía con Chela y Nacho, me baje del auto y me metí en el bar.
–¿Qué va a tomar? –dijo el viejo que estaba al otro lado del bar. Vagamente me pregunte porque estaría abierto el bar esta noche –
Juan: vodka –algo fuerte para olvidar esta noche de mierda. El viejo me trajo lo que le pedí, cuando iba por mi cuarta copa un perfume invadió mis sentidos. Cuando la vi, le estaba dando dinero de un viejo de pelo rubio, este le dijo algo, ella se giro y me vio. Tenía los ojos más marrones que había visto en mi vida, pero sin nada de brillo, su pelo rubio le llegaba más debajo de los hombros, su boca era de un rojo fuerte, y su piel tan blanca como la porcelana. Su cuerpo era el paraíso, tenía las mejores tetas naturales que vi, y su culo era lo mejor, ni grande ni chico, estaba bien formado, llevaba un remera roja que solo cubría sus pechos y una pollera que se le ajustaba al cuerpo, con unos zaparos altos. Mi polla palpito al instante. –
–Hola… –dijo ella con su voz suave. –
Juan: Hola…
–¿Puedo saber que hace alguien como vos a estas horas por aquí? –
Juan: ¿alguien como yo?
–ajam… se nota que eres todo un ricachón…–
Juan: ¿y puedo saber porque deduces eso…?
–Emm, si. Llevas un traje que cuesta más de lo que yo puedo ganar en una semana, y se nota que tu rejos es súper caro –
Juan: que observadora… –le ofrecí un poco de mi bebida –
–no gracias… –sonrió, sus dientes eran blancos, era muy bonita para ser una prostituta–
Juan: ¿cómo te llamas?
–Me llamo Mariana, pero todos me dicen Mary… ¿vos? –
Juan: me llamo Juan Pedro, pero todos me dicen Juan…
Mary: ¿y te apetece algo de compañía esta noche? –sonreí de lado –
Juan: si… –sería la mejor forma de olvidarme de mis problemas. Además ya todo me vale mierda con Martina. – tomemos algo antes… ¿quieres tomar algo?
Mary: una cerveza está bien… –el viejo le sirvió una. –
Juan: y bien Mary, ¿cuántos años tienes?
Mary: veintiséis años… ¿tu?
Juan: veintinueve años…
Mary: ¿eres casado?
Juan: ¿tú qué crees?
Mary: ¿me dejas adivinar?
Juan: adelante…–ella sonrío triste y me miro a los ojos–
Mary: eres un hombre casado, que sin dudas no es feliz, de serlo no estarías aquí. Tienes una vida muy monótona y te aburres de la rutina… podría decir que extrañas tus viejas épocas de soltería y que está aquí considerando si dejar a tu esposa o no…
Juan: eres buena…
Mary: se me da fácil leer a los hombres… –tomo un trago de su cerveza –
Juan: ¿puedo hacer lo mismo?
Mary: adelante… –dijo ella con una sonrisa imitando mis palabras de hace un rato –
Juan: no estás aquí porque quieres, no lo haces por gusto. Aunque claro, nadie lo hace por gusto. Eres alguien que intenta progresar pero que sin embargo no la dejan o no puede porque tiene que sustentar a más personas, una madre o hermana enferma tal vez. Podría decir que no eres del todo feliz, y que eres de esas mujeres que quiere su “felices para siempre…”–sonrío–
Mary: casi… ya perdí las esperanzas…
Juan: ya somos dos…
Mary: ¿te molestaría si te pido que nos vallamos de aquí? –la mire sin entender– no hagas preguntas por favor…
Juan: está bien… –accedí solo porque el hombre al que ella le dio el dinero hace unos momentos nos estaba mirando. Pague la cuenta y salimos. –
Mary: ¿dónde vamos?
Juan: conozco un hotel cerca de aquí… –no estaba apurado, y no estaba seguro de querer costarme con ella. Simplemente quería algo de paz y ella me la daba. Eso fue una revelación–
Mary: está bien…–la lleve donde estaba mi auto y nos subimos–
Juan: eres muy bonita, ¿por qué haces esto? –vi que sus mejillas se ponían algo coloradas –
Mary: algo de lo que dijiste en el bar hay, pero no me gusta compartir ese tipo de información con… otras… emm, personas…
Juan: lo entiendo… –ninguno de los dos dijo nada más hasta que llegamos al hotel, no era nada del otro mundo, pero estaba bien para mí. – ¿te confieso algo?
Mary: ajam…
Juan: hace mucho que no sentía tanta paz con una mujer… creo que nunca lo sentí…
Mary: ¿gracias?
Juan: gracias a vos… hace mucho que no me sentía así…–me acerque a ella, olía tan bien– me encanta tu perfume.
Mary: y a mí el tuyo…–puse mis manos en su cintura, casi la podía rodear. Acerque mi rostro al suyo–
Juan: ¿estás segura que queres hacer esto?
Mary: sos el primer hombre que me pregunta eso…
Juan: es tu decisión… –sentí como tembló bajo mis manos–
Mary: si, lo quiero Juan…– mi boca fue directo a la suya, y se juntaron a la perfección, pedí acceso a su boca la cual ella me dio y fui a por su lengua, sabía tan bien. Fue un juego de lenguas, labios y dientes. Empezamos a caminar a la cama ella estaba debajo de mi cuerpo y lo único en lo que podía pensar era en hincharle los labios, arrancarle sus ropas y hundirme en ella hasta el amanecer. Con esta mujer era imposible contenerse, quería que esto durara lo más posible. Sus manos fueron a mi chaqueta la cual saco con facilidad dejándola caer a un lado, para luego sacarme la camisa. Mis manos subieron a esa blusa que solo le cubría las tetas, y se la saque, al igual que su pollera que se junto con el montón de ropa ya tirada. Gruñí tirando abajo sus bragas, ella gimió asombrada y me di cuenta que lucía cien veces más atractiva que cualquier mujer con la que me acosté. Me quité los zapatos y medias de un tirón  y me deshice de su sostén rápidamente. Es increíble cómo mis habilidades se perfeccionaban cuando más excitado me encontraba.
Mary se aferró a mi cuello y de su garganta salió un sonido como un ronroneo o un gruñido, y fui directamente a sus pechos para besarlos.
Mary: ¡Oh, Juan! – Jadeó con una voz muy dulce y cálida que me estremeció de pies a cabeza. Aferró sus piernas a mis caderas y mientras intentaba quitarme los pantalones, nos tambaleábamos incómodos.
Juan: Ponte bien la cama, ahora – Le ordené y nos levantamos. Ella se acomodo encima de la cama y yo la acompañé, volviendo a besarla. –Tengo que admitirlo. Me pones mucho, me excitas tanto, te vi y me gustaste en el mismo instante– Jadeé encima de su cuello mientras ella acariciaba mi espalda y cabello. – Quiero follarte, bonita. Quiero venirme dentro de ti, afuera. ¡Donde sea! –
Mary ¿Y qué esperas para empezar? – Ronroneó acariciando mi vientre bajo.
No sólo me asombró, sino que me descolocó. ¿De dónde había salido ese vocabulario?
No obstante, me prendía de una forma que consideraba ilegal. Volví a besarla y me bajé los pantalones de un tirón. Ella me observó, asombrada. – Ahora es cuando se supone que debo mostrarme asombrada y elogiar el tamaño de tu polla, ¿verdad? –sonreí y mis labios se unieron a los suyos mientras me posicionaba en ella. – Creo que estoy ebria – Contestó a una pregunta no formulada mientras se reía. –
Juan: ¿En serio? – Pregunté cerca de su cuello.
Mary: No, soy consciente, quizás estoy ácida — Dijo. –
Juan: Mmm, déjame que te endulce un poco– Ronroneé, tomé sus caderas con firmeza, y entré en una sola estocada. Mientras embestía una y otra vez a Mary me di cuenta que ella superaba con creces cualquier follada. No podía creer que esta criatura apareciera en mi vida esta noche, me volvía loco, parecía ser tan experta en sus movimientos.
La forma en que su cabello rubio se despeinaba, la forma en que su boca se abría en una O luciendo perfectamente delicada y cómo se mordía sus labios, no podía comprender de dónde salía tanta belleza en cosas tan simples y pequeñas.
Y con los gemidos en el fondo de la habitación, la sentí tensarse a mí al rededor cuando llegó al clímax. En menos de cinco minutos.
Mary Juan – Me llamó mientras la embestía –. C-Córrete... por favor. – Nunca podría negarle algo como eso. Di una última estocada antes de salir y correrme encima de su cálido centro. Mientras jadeaba, observaba sus expresiones  y cómo lograba excitarme con cada una de ellas. Pensaba que esta mujer era la medida perfecta. Y aunque eso asustaba, no quería pensarlo demasiado.
Juan: ¿Otra vez? – Jadeé y ella asintió riéndose.

Fin Flashback


Llegue al orgasmo solo con su recuerdo. Parecía una mujer recordando el mejor follón de su vida. Me levante y me fui a bañar para eliminar los restos de semen en mi mano, odiaba no volver a saber nada de Mary. Nunca más la volvería a ver. Pero en mis sueños siempre la coy a seguir deseando…
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LO TERMINEEEEEEEEEEE!! soy feliz! saben hace cuanto que no escribía un rock?? creo que un año o algo asi! pero soy FELIZ! me encanto como quedo, osea, desde hace días que venia pensando en que no queria que sean Lali y Peter y tan tipico como siempre. o tal vez si sea tipico pero y lo ame... Espero que les gustara tanto como a mi escribirlo. Idea original mia, como ya saben! tipo ocho de la noche voy a subir novela!!! GRACIAS POR LEER!!! si les gusto comente que les parecio! por aqui, face, wpp, ask o twitter, los link estan en la cajita de "conectame" GRACIAS POR A TODAS!! 

12 comentarios:

  1. wowww me encantooo . .muy bueno

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  2. me encantoooooooo osea estuvo re bueno re cheto fue tan adkhkjssdg lo que mas me encanto que es que le hizo cornuda a martina esa parte fue LO MAS osea fuiste una grosa al inventar eso final distinto corto distinto que copado esperando con ansias el capitulo de la nove ya que se acerca los caps finales al no ser que la alargues mas...me encantoooooo cele

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  3. Dioooooooooooooos... Meeee encaaaantaaaaa!! ES EL MEEEJOR ROCK QE HE LEIDOO ME ENCAAANTOO!!

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  4. Muy bueno!
    Me encanto la idea del corto! Muy original :)

    @ligiaelenaCM

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  5. Mas me encanto segui el corto plis unos de los mejores rokk quue eh leido

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  6. Muyyy bueno muy muy bueno .. Esperó que sigas esctibiendo :)
    @x_ferreyra7

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  7. Lu que buen corto y me encantó el rock ya sabes que soy algo pervertida :) igual quiero saber la parte de Lali y que tengan un bebe producto de no cuidarse.
    Ruthy

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  8. Pasense http://novelaslaliterlove.blogspot.com.ar/?m=1

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